7 de set. 2014

Clausura del IV Congreso Internacional de Historia y Cine sobre la Memoria Històrica y Cine Documental

El IV Congreso Internacional de Historia y Cine, celebrado en la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad de Barcelona ha culminado con la conferencia de clausura a cargo de la periodista y directora de documentales Maria Dolors Genovès, quien durante su intervención destacaría que “el documental de investigación histórico necesita la aportación de algo nuevo a lo que ya se conoce, y esto obliga a trabajar a fondo en los archivos”. Genovès, profesora de la Universitat Ramon Llull y conocedora de la problemática que conlleva la investigación y la producción de documentales históricos, ha dirigido una veintena de documentales acerca de hechos históricos como el asesinato del dirigente del POUM, Andreu Nin (Operació Nikolai, 1992), o la biografía del líder de la Lliga Regionalista, Francesc Cambó (Cambó, 1996). También señaló en su disertación que no existe ningún tipo de censura por parte de la Televisió de Catalunya en cuanto a la producción de documentales históricos. 
El congreso, dirigido por Josep Maria Caparrós, catedrático de Historia Contemporánea y Cine de la UB, y Magí Crusells¸ vicedirector del Centre d’Investigacions Film‐Història -organizador del evento-, arrancó el miércoles 3 de septiembre con la memoria histórica y el cine documental como objeto de debate y ha conseguido congregar a más de un centenar de personas entre comunicantes, conferenciantes y asistentes.


La primera jornada del IV Congreso Internacional de Historia y Cine comenzó con la conferencia inaugural de Jean-Claude Seguin, catedrático de Historia del Cine de la Université Lumière de Lyon, quien realizó un recorrido por los orígenes del cine remarcando la importante labor desarrollada por los hermanos Lumière en el siglo XIX, cuyas primeras imágenes impactaron en el público al reflejar temas novedosos con decorados en movimiento. Mientras que José Carlos Suárez, profesor de la Universitat Rovira i Virgili, se centró en el poder de la imagen como traspaso de la realidad y como representación visual de la memoria histórica. 
La idea central acerca de la importancia que tiene el cine documental como fuente indiscutible para la reconstrucción de nuestra memoria histórica ha sido una constante a lo largo de los tres días del congreso. Prueba de ello son algunas de las declaraciones de los ponentes como el profesor Esteve Riambau de la Universitat Autònoma de Barcelona quien afirmó que “el cine es el mejor antídoto contra el Alzheimer histórico y social”, idea que comparte el periodista, productor y director de documentales Albert Solé, que recordó la frase del cineasta chileno Patricio Guzmán: “Un país sin cine documental, es como una familia sin álbum de fotos”. Por otra parte, la profesora Sasa Markus de la Universitat Pompeu Fabra trató de las películas de la Guerra Civil española desde la posmodernidad, y Magí Crusells (Universitat de Barcelona) de Franco, protagonista del NO-DO. Además de las ponencias, el IV Congreso Internacional de Historia y Cine ha reunido más de cien comunicaciones de temática y ámbito geográfico muy diverso, con comunicantes procedentes de Estados Unidos, Brasil, México, Chile, Italia, Francia, Gran Bretaña, Hungría, Eslovaquia y de diferentes universidades del ámbito nacional. Asimismo, ha sido el marco para la presentación de libros como el de Ángel Luis Hueso y Gloria Camarero, Hacer historia con imágenes, o el de María Luisa Pujol, Un viaje por la magia del cine. Sin olvidar la entrega del Premio Film-Història al profesor de la Universidad de Zaragoza, Fernando Sanz Ferreruela, por su obra Catolicismo y cine en España (1936-1945). Por último, tras la clausura por parte del Rector de la UB, Dídac Ramírez, tuvo lugar el preestreno en la Filmoteca de Catalunya del documental Cinema en temps de guerra, de Bartomeu Vilà.